Un flechazo a primera vista, eso fue lo que sentimos cuando conocimos a Vanessa y Víctor. Una pareja natural, romántica y con un rollazo de los que molan. Tenían claro que querían una gran boda, y que para conseguirla ¡necesitaban ayuda! Y es que conseguir una boda cuidada al detalle y personalizada al 100% no es tan fácil. Así que nos pusimos ¡manos a la obra! Contaron con nuestro servicio de Organización Integral, y tuvimos el placer de trabajar junto a ellos durante muchos meses. 

Desde el principio tuvimos claro que la vegetación y las flores eran una parte fundamental. Empezamos a dar forma a sus ideas y gustos, y la boda se fue encaminando hacia una inspiración natural, en tonos verdes pálidos, melocotones románticos y rosas empolvados. Todo, cuidado para conseguir esa ambientación romántica y natural.  Un ramo despeinado, con rosas inglesas y eucalipto, entre otras flores. Ella, nuestra Vanessa, absolutamente perfecta con su melena pelirroja, su tocado de flores de Aniburech y un escote que dejaba a la vista sus bonitas pecas. Una ceremonia civil bajo un arco de madera antigua, coronada con eucalipto y flores, con el ritual de la plantación. 

Y sobre todo, muchos muchos besos. Aunque de eso, nunca falta en nuestras bodas.

Localización: Hacienda El Loreto
Catering: Campuzano
Make Up: Marta Vera
Tocado: Aniburech
Ramo de novia: La Buganvilla
Fotografía: Ernesto Villalba
Vídeo: Oui Motion
Decoración floral: La Buganvilla
Repostería: Aquarela cakes
Música: Nubia y Dj Pato Deluxe